1930

Acostate con migo en los adoquines
te grite
en este callejón de escenografía
que me hace acordar
a todo el jazz que me ponía mi viejo de chico
y a un par de películas mentirosas (creía yo) que me tiñeron los ojos mientras crecía

enfrié mi cuerpo,
algo mutilado por la época
sangrando sin darme cuenta
me lastimaba mi profundidad
causalidad del fichero
lleno de existencia- lidad

la cabeza cae hacia atrás y todo el resto pesa menos
a 90 grados con el cielo
y a 180 con las piedras muertas
perpendicular a la felicidad de poder sentir el presente
sin toda esa contaminación temporal
que apedrea mi calma
como un 2001 en mi cabeza
y un corralito de sentimientos

le di finalmente a la ventana
y la rompí
el cascote era mi corazón
pero no importa
porque ahora el viento se va a llevar
todas mis palabras
y mi calor
y voy a poder estar tranquilo
como una alcancía llena de polvo

acostate en el piso
ni me tenes que mirar
si queres me podes dar la mano
y yo te escucho respirar

te quiero porque nunca te quisiste dar cuenta
del aire que trague
para no decirte la verdad

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